12 de abril 08
Hoy Irene se ha metido en mi blog. Le ha gustado mucho, me ha dicho toda cariñosa, y ha “flipado en colores” porque cree que me manejo con toda facilidad (¡¡¡con lo que me cuesta hacer cualquier cosita, que ayer mismo me acosté a las 4 de la madrugada, haciendo y deshaciendo...!!!) pero también me ha recomendado que haga un “cursillo sobre los acentos”, y se lo agradezco. Por eso (sin tilde) tengo que pedir disculpas a alguien, a ese alguien que se asome por aquí alguna vez y solicitar su benevolencia a la hora de encontrarse con mis erratas gramaticales; mientras tanto, seguiré escribiendo y me esmeraré todo lo que pueda para corregirlas.
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4 comentarios:
No cambies nada, por favor. Es un maravilloso soplo de aire fresco leerte, además de una verdadera lección de vida (aunque sea a costa de tus horas de sueño). Un beso enorme y enhorabuena.
Muchas gracias. Me animan tus palabras.
Es que me encanta escribir porque suelo hablar bastante poco y por algún sitio tienen que salir los "interiores" cuando ocupan mucho...
Besos
De los acentos y las tildes, ni caso. Yo me he pasado toda la vida acentuando mal las palabras al hablar, que se nota más que cuando escribes. Decía "comoda" en vez de "cómoda"; y todavía hay palabras que dudo antes de decirlas, y acabo diciéndolas mal casi siempre.
María, me ha encantado que publicaras LA PEDRADA. La apendí de niño en el colegio y la recordaba con cariño. No sabía ni el nombre ni el autor autor y la estaba buscando. ¡Por fin la encontré en tu blog!, graciss María
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